PROPÓSITO
Cada grupo social elige a sus sabios y a sus héroes. Pero al elegirlos se define a sí mismo, tanto o más que a la persona escogida como paradigma de sabio, de filósofo o de héroe.
- Gustavo Bueno
Cada grupo social elige a sus sabios y a sus héroes. Pero al elegirlos se define a sí mismo, tanto o más que a la persona escogida como paradigma de sabio, de filósofo o de héroe.
- Gustavo Bueno
Todas nuestras piezas se realizan de forma artesanal, personalizada y bajo pedido.
Cada busto, corona o joya pasa por procesos de diseño, lijado, pintura y sellado manual, lo que hace que cada ejemplar sea único.
Debido a esta dedicación, los tiempos de elaboración pueden variar entre 7 y 14 días hábiles antes del envío.
Agradecemos profundamente tu comprensión: la espera es parte del proceso creativo.
El arte requiere tiempo. Nosotros respetamos ese ritmo.
Utilizamos resinas artísticas, pigmentos metálicos, pátinas de oro envejecido y mezclas minerales diseñadas para ofrecer un acabado escultórico de alta calidad.
Cada textura —desde el mármol cósmico, hasta la obsidiana mate, la pintura pulticromática o el lapislázuli— está pensada para mantener una coherencia estética y simbólica entre todas las colecciones.
Todas las obras de Neo Ídolos pertenecen a drops limitados.
Una vez cerrada una edición, no vuelve a reproducirse.
Cada pieza incluye su certificado de autenticidad digital y físico, garantizando su procedencia y unicidad.
Neo Ídolos nació de una ironía muy española.
Siendo católicos, nos llamaron idólatras, y respondimos con arte.
Porque el arte no es idolatría: es un recordatorio de la eternidad.
La idolatría es la vanidad del
individuo, lo banal;
el arte es orgullo de todos, lo trascendente:
la valentía, la verdad, la belleza.
Expresión visible de las grandes virtudes
en las que experimentamos lo divino.
Toda civilización comienza en un
rito y muere cuando olvida sus orígenes.
Por eso Neo Ídolos no es una marca: es una cruzada estética.
Un intento de restaurar la unión entre piedra, fe y sangre,
de devolver a la forma su poder de inspirar el espíritu.
Somos herederos de la sabiduría
de Grecia,
de la ley de Roma,
del desengaño de España,
y de la fe católica que les dio sentido y alma.
De esa síntesis católica, trágica y heroica que dio sentido al mundo
se alza nuestra obra,
como una nueva Anábasis:
el ascenso del hombre hacia su renacimiento.El mármol, el oro, la obsidiana o el lapislázuli
son vehículos que hacen de cada busto, un espejo.
En Neo Ídolos,
el Ídolo no representa una figura ajena: te representa a ti.
Es el reflejo del ideal que estás llamado a ser, la tensión entre tu destino y virtud.
Nuestra misión es restaurar el culto a la grandeza.
El Ídolo no es un fetiche: es un espejo donde el hombre moderno vuelve a ver su llamado.
Frente a una época que ha
cambiado el rito por la inmadurez perpetua, la verdad por la opinión,
y el arte por la propaganda;
que ha sustituido a los héroes, a los santos y a los sabios
por falsos ídolos, artistas farsantes,
ideologías huecas y tramas de falsos salvadores que ofrecen sinsentido a cambio de obediencia,
que entretienen para domesticar,
que confunden libertad con deseo
y virtud con marketing,
El Ídolo no salva:
revela. Y quien se atreve a mirarlo sin máscaras, recuerda quién es.
— Caesar Borja, fundador
de Neo Ídolos